Cerveza Helada

Iba incrementándose con brutal demencia el patetismo, a raíz de la falta de interés por los galicismos pedorros y las contradicciones inagotables que abarcan lo largo y lo ancho, la superficie y las profundidades de lo diario y monótono. Llegué a casa con la sensación de hastío que me caracteriza, pero aquella vez fue un poco más punzante. Abrí la puerta y estaba allí, en casa, aquella mujer con la que me veía sometida a convivir; yo tenía una cerveza de litro camuflada porque a la dama no le gustaba que la gente bebiese, quería con todo su ser la ley seca: Jajaja, así me río.
Entré en mi habitación y de toque sonó la puerta:
_"¿Si...?"
_"Nena, vení a tomar unos mates a la cocina que quiero hablarte de algo"
_"De acuerdo"_ Abrí la puerta, caminé unos pasos a someterme a la típica charla. Desagradable, comenzó a tirarme una mierda tras otra,
_"Mirá, estoy cansada de que estés todo el día ahí encerrada, parece como si no te importase nada de la vida ¿qué hacés tanto tiempo, sola, no te intersaría ayudar a otra gente?"
_"En verdad lo disfruto, comparto lo suficiente con vos y los demás, no comprendo... No me interesa, a nadie le interesa, es puro simular..."
_"¿y qué hay con los médicos? Ellos disfrutan de ayudar a la gente"
_"puras macanas, la gente sólo quiere y anhela una cosa: Dinero"
_"No todos, cada cual busca su camino"
_"emmm, sí, no puedo generalizar, es cierto, pero ellos en general, esos profesionales, sí. Mirá me voy a ir de nuevo al cuarto, ésto no tiene sentido, está todo tranquilo, me duele la cabeza."
_"¡Ahh! Siempre es lo mismo, no te das cuenta de que hay gente que quiere lo mejor para vos, nada te interesa, no tenes amor por nada."
_"te equivocás de nuevo, siento tanto amor que me espanto y necesito estar sola, así puedo crear algo productivo para mi mundo de mierda. Me da como la sensación de que estás un poco irritada, ¿puede ser?"
_"Mirá, nenita, yo me deslomo por tener un futuro y una vida respetable, no vas a venir a decirme vos, ilusa, lo que es bueno y productivo en esta vida"
_"No te cuestioné qué es productivo y qué no, gracias por lo de ilusa. Nos vemos después."_ Me levanté de la silla y encaré para el cuarto. Sentí como una mano presionó con omnipotencia y crueldad mi brazo como intentando detenerme, de la manera más autoritaria que se pueda imaginar.
_"¡Vos no te vas a ninguna parte! ¿¡Me sentís, ehhhh!?"
_"No es necesario que actúes de esta manera, soltame"_ Seguido de decirle esto último empezó a zamarrearme con mayor intensidad, brutal, como queriendo ganar un enfrentamiento ficticio.
No pude evitar defenderme, no tenía otra alternativa. Los tirones de pelo, arañazos y puñetazos abundaban y volaban por la cocina, hasta que en un momento de ceguera general de mis sentidos tomé un cuchillo y se lo clavé en el cuello, la degollé como a una gallina un campesino con experiencia en ese desagradable trabajo. Dejé el cuerpo en el suelo, puse debajo de la herida un trapo para que no se llenase todo de sangre, luego vería qué hacer con aquél chiste. Mientras tanto volví a mi habitación, la cerveza aún estaba helada.